Desde el día 10 de abril ya está a la venta el nuevo libro de Félix Generelo: Memorias de Juan Latre. "Un marino aragonés en el fin de un imperio".
La sinopsis del libro en la ficha del libro de la editorialpirineo.com
Historia Archivística :
Historia Institucional/Reseña Biográfica : Juan Latre y Aísa
nació en Huesca el 24 de junio de 1769, hijo de D. José Latre y Lacueva y Dª
Antonia Aysa. De familia de juristas, su padre era catedrático de Prima de Leyes
de la Universidad Sertoriana y un hermano suyo fue también abogado y doctor por
la misma Universidad. Sentó plaza de Guardiamarina en El Ferrol en junio de 1787
y dos años después inició sus singladuras transatlánticas en distintos barcos de
la Armada Española. En marzo de 1789 se embarcó como brigadier propietario de
Guardias Marinas en el Navio San Telmo. En diciembre de ese año fue destinado a
la Corbeta San Pío con la que llegó al Río de la Plata. De allí se trasladó
posteriormente a las fragatas Sabina y Magdalena y posteriormente al Paquebote
Santa Eulalia. En 1791, ya como alférez de fragata, se encarga del mando de
bergantín Piedad y en 1793, como alférez de navío, del San Julián. Volvió a
España en 1795 pero por poco tiempo porque, un año después, en diciembre de 1796
vuelve a Montevideo en la fragata Leocadia al mando del Capitán de Navío D.
Antonio Gómez de Barrera. Tres años después, en 1799, pasa al Pacífico y llega
en el mismo buque a el Callao donde permance, como base de otros viajes, hasta
1802, año en que asciende a teniente de fragata. En julio de ese mismo año, por
orden del Comandante General de Marina, toma el mando del navío Santo Domingo de
la Real Compañía de Filipinas y emprende viaje a ese archipiélago a donde llegó
a principios de octubre. Vuelto a España en 1803 y enfermo de escorbuto por esta
última travesía, solicitó y obtuvo una licencia temporal para restablecerse en
Madrid. Tras seis meses en la Corte, volvió a embarcar en el mismo navío otra
vez con destino a Filipinas y Cantón. Años después participó en la defensa de
Buenos Aires contra los ingleses y en su posterior recuperación por los
españoles (1806-1807). A partir de 1810 participa en la Guerra de Emancipación
de los países del Río de la Plata hasta la caída de Montevideo. Vuelto a España
en 1814 asciende a capitán de Fragata un año después y a Capitán de Navío
(retirado) en 1816. Entre sus servicios a la Corona destacan el reconocimiento
de la parte más meridional de la costa patagónica y de las Islas Malvinas
primero a bordo del Santa Eulalia (1791) bajo las órdenes de D. Pedro Pablo de
Sanguimeto y posteriormente al mando de los bergantines Piedad y San Julián
(1993). En éste última expedición expulsó a los ingleses y americanos que se
encontraban en las islas occidentales de las Malvinas. También cabe destacar un
reconocimiento de las Islas Galápagos en 1800, viaje en el que, según su propio
testimonio, fue el primero en determinar exactamente la longitud del
archipiélago. No sabemos con exactitud la fecha de su muerte pero debió
producirse en torno a 1828 porque el 19 de julio de ese año otorga testamento ya
enfermo en Madrid.